Tanto en mi vida profesional, como en mi vida personal, a menudo me encuentro con estas preguntas cuando la gente se entera de que soy psicóloga especializada en terapia de pareja: ¿qué es la terapia de pareja?, ¿para qué va la gente a terapia de pareja?, o ¿para qué sirve?
¿Qué es la terapia de pareja?
Es un tipo de intervención terapéutica en el que un especialista trabaja con una pareja, enseñándoles distintas herramientas para solventar las dificultades que presenten.
¿Cómo funciona la terapia de pareja?
Las sesiones que yo realizo tienen una duración de una hora.
A la mayoría de las sesiones acuden ambos miembros de la pareja, y de forma puntual vienen por separado (dependiendo del caso y la necesidad). Como siempre les digo a mis parejas “necesitar en algún momento hacer la sesión de forma individual, no significa que exista necesariamente algo que esconder, sino que en ocasiones es mucho más sencillo expresarse sin que esté nuestra pareja delante”.
¿En qué momento es recomendable acudir a terapia de pareja?
Dedico el primer día de terapia a recoger los datos y el motivo de consulta. Lo más común es que las parejas me digan “hace meses/años que teníamos que haber venido a terapia” y “esto es lo último que intentamos, o funciona la terapia o nos separamos”. Un alto porcentaje de las parejas que acuden a terapia vienen más tarde de lo que sería aconsejable.
Puede generar dudas esa delgada línea entre “¿solventamos esto que acaba de surgir solos, o vamos a terapia para resolverlo?”. Se puede salir de la duda viendo si con el paso de los días, semanas o meses la pareja lo resuelve (con la búsqueda de estrategias, y la puesta en marcha para solventarlo). Ir a terapia cuando la pareja lleva años mal no es idílico, pero tampoco es descabellado, mejor ir a terapia para poder trabajar y resolver, que no ir y quedarnos con la duda de “¿esto podría haber tenido solución con ayuda?”.
¿Cuáles son los motivos de consulta más comunes?
Llevo casi 8 años trabajando como terapeuta de pareja, y las dificultades que más suelo encontrarme son las siguientes:
- Comunicación.
- Dependencia emocional.
- Negociaciones.
- Resolución de conflictos.
- Toma de decisiones.
- Distanciamiento.
- Maternidad/paternidad.
- Educación de los hijos.
- Planes de futuro.
- Actividades de ocio.
- Valores e intereses en común.
- Problemas con las familias de origen.
- Desconfianza.
- Rupturas.
- Convivencia.
- Afectividad.
- Sexualidad.
- Infidelidad.
- Relaciones tóxicas.
- Relaciones de poder.
- Celos.
¿Cómo se trabajan todas estas dificultades o problemáticas?
El trabajo que realizará la pareja se llevará a cabo durante las sesiones y con tareas para casa. Generalmente suele haber una parte de trabajo individual, y otra parte conjunta.
La pareja es un equipo y como tal van a trabajar sus dificultades para encontrar el equilibrio, desde la empatía y el respeto, con asertividad, con mucha comunicación y escucha activa, con las gafas de la tolerancia, con responsabilidad hacia uno mismo y hacia el otro.
Además de ofrecer herramientas según la problemática para que la pareja vaya resolviendo poco a poco sus dificultades, gran parte del trabajo que hacemos los terapeutas de pareja se basa en la mediación.
¿Cuántas sesiones son necesarias?
Lo cierto es que depende de muchos factores: del motivo de consulta, del tipo de pareja, de cómo evolucione la pareja, de las cosas que puedan ir surgiendo a lo largo del proceso, del tiempo que hayan convivido con los problemas, etc.
¡Pero lo que sí está claro es que merece la pena!
Y tú, ¿sabías lo que abarcaba la terapia de pareja antes de leerme?
Puedes comentar o preguntarme lo que desees. ¡Siempre respondo!
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