En este post te propongo reflexionar sobre dos temas que van de la mano, las expectativas y la frustración.

¿Te ha pasado alguna vez esperar más de lo que recibes? En general, la emoción que suele estar presente en estos casos es la frustración.

El autor de “El principito”, Antoine De Saint-Exupery, escribió: «si ordeno-decía- a un general que se convierta en ave marina y éste no obedece, no sería culpa del general, sino exclusivamente mía», y “se debe pedir a cada cual lo que está a su alcance realizar”.

¿Qué crees que quiere decir con éstas palabras? Bajo mi punto de vista, de forma muy resumida y sin muchas florituras, una mezcla entre «acepta lo que las personas pueden/quieren darte» y “no le pidas peras al olmo”. 

A veces las personas no dan más, porque no pueden, porque no saben cómo hacerlo, o porque sencillamente no quieren.

¿De quién es la responsabilidad de esperar de más? La responsabilidad siempre es de la persona que espera, ¿por qué?, porque si no esperas y sin más te dejas sorprender, la frustración no invadirá tus días. Pero ¡ojo!, esto no es nada fácil de conseguir, hay que conocerse muy bien, y conocer muy bien también a la persona que tienes delante y de la que esperas ciertas cosas. Una vez que conoces las capacidades y limitaciones de esa persona, la aceptación le echará un pulso a la frustración.

“Falto de amor a ti cuando intento que seas como yo quiero en vez de aceptarte como realmente eres”.

Fritz Perls.

Hace unas semanas escribí en otro post sobre las circunstancias del día a día que no podemos controlar y el sufrimiento que puede generar esa falta de control. Puedes leer el post “¿Qué decides hacer con tu tiempo?” aquí.

Aceptar no es resignación, sino adecuar las expectativas que tenemos de una forma realista, para poder establecer relaciones sanas, asertivas y respetuosas.

ELENA GUIJARRO – ÉPSILON PSICOLOGÍA

¿Qué ocurre cuando la otra persona no puede dar más de lo que da? Cuando esto ocurre la frustración es doble. Frustración por parte de la persona que espera y no recibe, y frustración por parte de la persona que no llega dónde se le pide.

Y todo esto, me lleva a hablar de las necesidades y de estas palabras de Fritz Perls, creador de la terapia Gestalt:

“Yo soy Yo
Tú eres Tú
Yo no estoy en este mundo para cumplir tus expectativas
Tú no estás en este mundo para cumplir las mías.

Tú eres Tú
Yo soy Yo.
Si en algún momento o en algún punto nos encontramos
Será maravilloso
Si no, no puede remediarse.
Falto de amor a Mí mismo
Cuando en el intento de complacerte me traiciono.
Falto de amor a Ti
Cuando intento que seas como yo quiero
En vez de aceptarte como realmente eres.
Tú eres Tú y Yo soy Yo.” 

“En el intento de complacerte me traiciono”. ¿Te ha pasado alguna vez que has dejado a un lado tus necesidades, por intentar cubrir las del otro?

Puedes comentar o preguntarme lo que desees. ¡Siempre respondo!

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